España cierra 2022 con casi 20,5 millones de ocupados, la mayor cota de empleo alcanzada desde la burbuja inmobiliaria

El mercado de trabajo en España aguanta pese a las incertidumbres económicas. La Encuesta de Población Activa (EPA), publicada este jueves, recoge un repunte de la tasa de paro en el cuarto trimestre de 2022 (del 12,67% al 12,87%), pero el país se mantiene en cifras muy positivas de trabajadores ocupados. Hay 20.463.900 millones de personas trabajando en España, 81.800 menos que en el anterior trimestre, pero 279.000 más que un año antes. Así, la ocupación sigue en máximos de los últimos 15 años, solo superada ligeramente por los dos últimos trimestres. Entre las noticias positivas destaca el récord de contratos indefinidos un año después de la aprobación de la reforma laboral: 14.256.800 millones, 1.591.000 más que 12 meses antes. Entre las negativas, España vuelve a superar los tres millones de desempleados.
Aunque la tasa de paro suele aumentar en el cuarto trimestre, cabe destacar que se trata del segundo incremento consecutivo en la serie de la EPA, después del registrado en el tercer trimestre de 2022. El paro no crecía en dos trimestres seguidos desde 2018. Además, esta es la tercera EPA en la que se notifica un incremento del paro desde el verano de la pandemia, cuando empezó una notable caída del desempleo inmediatamente posterior al vertiginoso ascenso que significó el confinamiento. Así, el total de desempleados es de 3.024.000, y vuelve a rebasar la cifra de tres millones de parados, que España abandonó hace dos trimestres tras 14 años por encima (llegó a ser de 6,2 millones en 2013). Con todo, la tasa de paro es cuatro décimas menor que hace un año (13,33%).
Después de dos trimestres al alza, el número de trabajadores ocupados vuelve a caer en España. Además, decrece en un periodo que suele ser positivo para esta estadística: desde 2017, el número de ocupados siempre habría crecido en el cuarto trimestre. Si el balance es anual, España sí crece en número de empleados: hay 280.000 ocupados más que en el cuatro trimestre de 2021. Asimismo, el mercado laboral no acumulaba más de 20 millones de trabajadores al cerrar el año desde 2007, antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.
Estos datos alcanzan a España en un momento convulso, pero en el que varias amenazas asustan menos ahora que hace meses. La inflación se ha moderado últimamente: después de alcanzar hasta un 10,8% interanual en julio de 2022, en los tres últimos meses del año (los que se puede asociar a esta edición de la EPA), el Índice de Precios de Consumo marcó un en octubre un 7,3%, un 6,8% en noviembre y un 5,7% en diciembre. Así, España terminó con la menor tasa de inflación de la Eurozona, por debajo de la de Francia (6,7%), Alemania (9,6%) o Italia (12,3%). Además, el FMI calcula que el Producto Interior Bruto de España creció un 5,2% en 2022.
Esta EPA también sirve como un diagnóstico más afinado de los efectos de la reforma laboral, en vigor desde el 31 de diciembre de 2021, aprobada en el Congreso de los Diputados el 3 de febrero de 2022 y en marcha con todos sus efectos desde abril. Unos de los principales efectos de este nuevo marco normativo es la caída de los contratos temporales y el alza de los indefinidos. Hemos pasado de 12,66 millones de contratos indefinidos hace un año a 14,25 millones en este último estudio de la EPA. Ni durante los mejores años en ocupación y con menor tasa de paro (2006, 2007 y 2008) se había logrado esta cota de contratos indefinidos. De forma paralela, los contratos temporales caen a 3,11 millones, la cifra más baja desde 2013.
Con estas cifras, la tasa de temporalidad (17,9%) cae a un nivel nunca visto este siglo. En solo un año ha decrecido siete puntos y es la mitad que el récord de toda la estadística, el 35,2% del tercer trimestre de 1995. En los registros del INE, que han ido cambiado de metodología, solo se encuentra un registro menor: el 15,3% del segundo trimestre de 1987. Cabe apuntar que el segundo cuarto del año es más propicio para al empleo temporal, al igual que el tercero.
El Ministerio de Economía hace una valoración positiva de los datos. “Los datos de la EPA continúan constatando el cambio estructural en el mercado de trabajo tras la reforma laboral: la contratación indefinida registra un nuevo máximo histórico y la tasa de temporalidad se ha reducido más de siete puntos en 2022, cifra que nos acerca a la media europea”, indica el departamento en un comunicado remitido a la prensa. No obstante, el ministerio de Nadia Calviño reconoce que la creación de empleo bajó de ritmo en el último trimestre, “en línea con la ralentización de la economía mundial”.
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Source: elpais.com