El famoso festival inglés confía el cierre de sus tres días de actuaciones a grupos y artistas varones y blancos
“¿Hay una buena razón por la que Glastonbury presenta un programa de cabezas de cartel tan blanco y varonil?”, cuestiona un usuario de Twitter. “Estamos en 2023 y Reading tiene más mujeres protagonistas que Glastonbury”, compara una internauta entre figuras de emojis desconsolados. El pionero festival inglés, que atrae a cientos de miles de adolescentes y mayores a la granja Worthy casi todos los veranos, ha sorprendido a gran parte de su público y a ciertos invitados con una oferta ausente de figuras femeninas al frente de la cartelera.
Arctic Monkeys, Guns N Roses y Elton John cerrarán las sesiones en el escenario principal, el mítico Pirámide, las noches del 23, 24 y 25 de junio. La rapera Liso consigue colarse en primera línea del cartel publicado por la organización el pasado viernes, pero su posición real es de telonera de la banda estadounidense de rock duro, que se estrena en Glastonbury con Melissa Reese al mando del teclado. La formación de Axl Rose se hizo con el contrato después de que una artista femenina cancelara su invitación estelar debido a “cambios en su plan de gira”, de acuerdo con declaraciones de Emily Eavis, hija del fundador y coordinadora del evento, recogidas por The Guardian.
Eavis no identifica a la estrella caída, aunque podría tratarse de Taylor Swift. La cantante estaba fichada para la edición de 2020, que se suspendió debido a la pandemia del coronavirus, y su gira actual, The Eras Tour, recala en Minneapolis el fin de semana de la popular cita en la campiña de Somerset, en el sur de Inglaterra.
Más problemático resulta un aparente descuido de la organización respecto a Lana del Rey. La diva neoyorquina se siente dolida por el escaso protagonismo que la organización le ha dispensado y airea su frustración en las redes sociales. “Gracias por anunciar que soy cabeza de cartel en el Otro escenario‘”, ironiza en Instagram. El nombre de la intérprete de Summertime Sadness aparece hacia la mitad del cartel oficial, en letras mayúsculas azules, en un listado ordenado alfabéticamente, con excepción de los incluidos en la fila inicial.
Lana del Rey se resiste a ser tratada como simple telonera en una edición corta de mujeres en la cima. “Ya veremos”, sugiere amenazante en un mensaje en Twitter en el que reprocha la “desconsideración” hacia su prevista actuación en el “segundo estrado” de Glastonbury. Algunos interpretan el mensaje como una advertencia de que está dispuesta a romper su contrato con la organización.
El festival abarca un universo de unos 60 escenarios repartidos en 30 diferentes áreas de la granja, con espectáculos de música y otras artes escénicas en el más amplio abanico de estilos y evolución creativa. En la presente edición, el John Peel Stage ha sido rebautizado Woodsie (nombre del prado donde se ubica) en respuesta a una campaña pública para borrar el nombre del puntero descubridor de talentos, que presumió de ligar con escolares antes de morir, en Perú, con 65 años, en 2004.
De momento, Glastonbury ha anunciado la participación de 54 intérpretes y grupos en la nueva edición de la que se agotaron las entradas en una hora. No es un fenómeno insólito en una marca que atrajo 210.000 visitantes el año pasado. El 52% de los artistas confirmados para 2023 son varones y el 54% blancos. Por otra parte, el músico no binario Fever Ray y la intérprete ‘tran’ Christine and the Queens destacan en escenarios alternativos.
Montar un festival diverso en todos sus sentidos en una preocupación constante de Eavis. La coordinadora carga en la industria musical la labor de nutrir, aupar y promocionar a las artistas femeninas. “Hacemos todo lo que podemos, pero es necesario desarrollar el canal y eso comienza muy atrás, con las compañías discográficas, las emisoras de radio…”, declara al Guardian.
El vacío de mujeres en la cúpula discográfica se sintió en la última edición de los premios Brits. Se había eliminado la categoría femenina y ninguna mujer entró en las candidaturas como mejor artista. Harry Styles, quien cosechó la estatuilla y otras tres más, dedicó su victoria a compañeras y rivales qué se quedaron en la cuneta, desde Mabel a Florence Welch, Charli XCX, Rina Sawayama y Becky Hill. Las dos últimas se listan en el cartel de Glastonbury 2023, junto a Alison Goldfrapp, Carly Rae Jensen, The Chicks, Warpaint, Weyes Blood, Maggie Rogers y, entre otras, la veterana Blondie.
Source: elmundo.es